Sostenibilidad, equidad y calidad; ejes de la aportación de las y los trabajadora/es sociales al Servicio Madrileño de Salud.

Relanzando el acuerdo de la mesa sectorial sobre la organización de los servicios de Trabajo Social en el SERMAS, a través del COTS-MAdrid en la Asamblea de Madrid

Preguntas parlamentarias y la comparecencia de Daniel Gil, Vicedecano del Colegio en la Comisión de Sanidad de la Asamblea de Madrid para contar la realidad y potencial de la contribución de las/los Trabajadoras/es Sociales al Servicio Madrileño de Salud.

La semana pasada, en el pleno del 14 de febrero de la Asamblea de Madrid, el grupo parlamentario Ciudadanos planteó cómo estaba la situación de la puesta en marcha de la unidades de Trabajo Social en el Servicio Madrileño de Salud, a lo que respondió el consejero, Enrique Ruiz Escudero haciendo alusión a la implantación paulatina en los distintos hospitales de la red madrileña.

Hoy, Daniel Gil, Vicedecano del COTS-Madrid comparece en la Comisión de Sanidad de la Asamblea de Madrid para contar la realidad y potencial de la contribución de las/los Trabajadoras/es Sociales a la equidad, sostenibilidad y calidad del Servicio Madrileño de Salud.

La situación en cuanto a la estructura organizativa de los profesionales del TSS en el SERMAS, supone que actualmente no se ofrece una respuesta eficaz, de calidad, sostenible y desde luego que no equitativa.
La disparidad organizativa actual supone que los TSS dependan de las direcciones de enfermería (como unidades de apoyo) en atención primaria y de distintos servicios en la atención hospitalaria. Sólo un hospital de nivel 1 tiene una jefatura de sección de TSS, habiendo desaparecido 2 (Puerta de Hierro y Gregorio Marañón), la dependencia orgánica es muy variada, sin tener una línea común. La mayoría de los TSS dependen de los Servicios de Atención al paciente, generando una confusión entre ambas realidades.

Poniendo en valor el desarrollo de los servicios de atención al paciente del sistema sanitario, no podemos, en la compleja realidad social y asistencial actual, confundir los Servicios de TSS como un subservicio de atención al paciente.

Se requieren jefaturas de servicio de TSS que, dirigidas por profesionales de TSS, puedan: homogeneizar los servicios que prestan los profesionales en los distintos ámbitos, establecer criterios de evaluación adecuados al TSS, establecer canales de coordinación sociosanitaria estables, conseguir datos epidemiológicos desde el TSS que permita adecuar la asistencia a la realidad social del momento, que permita optimizar la labor de los profesionales dotándoles de calidad desde el conocimiento real de sus funciones… Falta de estructura que impide el acceso equitativo/la equidad en el acceso a las prestaciones de trabajo social sanitario.
El acuerdo de mesa sectorial reconoce que la falta de una estructura organizativa y jerarquizada de los TSS dificulta el establecimiento de una cartera de servicios de TSS homogénea, en este sentido asume la cartera de servicios de la Sociedad científica (AETSyS) como marco de referencia, presentada en el Ministerio el año pasado.
Existe un ejemplo paradigmático de cómo esta falta de estructura dificulta e incluso impide el desarrollo de proyectos y programas de gran importancia. La historia social sanitaria única que permite que la información social sea de acceso al conjunto de los profesionales, siendo permeable con la historia clínica. Historia social sanitaria única que permite que la información social relevante para los procesos asistenciales pueda ser compartida por todos los TSS, creando flujos de información claros entre unidades hospitalarias y entre hospitales y primaria.

Esta Historia social sanitaria única, es un proyecto ya creado por el SERMAS, el llamado RUHSO (registro único de historia social) y presentado en una jornada conjunta del Colegio profesional y el SERMAS, avalado por la organización colegial como una buena práctica. Esta presentación fue hace más de 5 años… y hoy dicho proyecto no está desarrollado de manera homogénea, cada hospital lo ha ido desarrollando de manera independiente o no lo ha desarrollado y su implantación en el HCIS (historia clínica única) actual es totalmente heterogénea, pero además sufre modificaciones que no responden a criterios profesionales de TSS, haciéndolo en muchos casos inoperativa a la labor profesional.

Es importante, como reconoce el acuerdo, que exista una figura de coordinación de las UTSS en el SERMAS, que permita establecer líneas de trabajo comunes y permita la consolidación y desarrollo de líneas de coordinación sociosanitaria homogéneas y sea capaz de implementar proyecto como el RUHSO de forma eficaz y “sostenible”.
El acuerdo asume esta realidad y plantea la creación de jefaturas de servicio en los hospitales de nivel 1 y en el resto jefaturas de sección. En el día de esta comparecencia dicho acuerdo aún no está desarrollado. Si bien la voluntad política existe y tanto las direcciones generales implicadas como el mismo consejero comparten la necesidad e importancia de dotar de estructura homogénea y específica, creando dichas UTSS, la implementación de las mismas parece una batalla “eterna”. Sabemos de la orden de la dirección general de recursos humanos de 7 de febrero que da “el pistoletazo de salida” a la creación de algunas de las unidades (hospitales de nivel 1 y alguno de los de nivel 2), esperemos que las mismas se creen de manera inmediata y podamos empezar a trabajar en condiciones más favorables.