Día Mundial de la Salud Mental. Por el derecho al bienestar
El 10 de octubre se ha celebrado el día mundial de la salud mental, este año bajo el lema “Dale like a la salud mental. Por el derecho a crecer en bienestar”. Sigue siendo, más que nunca, fundamental el desarrollo de políticas sociales y el impulso de mecanismos que, como sociedad, nos ayuden a lograr el bienestar emocional y social que nos permita un desarrollo pleno como comunidad e individualmente.
Desde el Grupo de Trabajo Social Salud Mental del Colegio Oficial de Trabajo Social de Madrid creemos, además, importante visibilizar la profesión en la atención a personas con un problema de salud mental.
El trabajo social en este ámbito tiene las competencias profesionales para incorporar el análisis e incidencia de los factores sociales en la génesis, desarrollo y atención de los problemas de salud mental, aportando así un prisma complementario e integral al que ya ofrece el paradigma biologicista y clínico. Es necesario contemplarlo como una exigencia básica para el cuidado de la salud y como requisito imprescindible para el desarrollo de una atención centrada en la persona.
Lo social forma parte de las diferentes dimensiones holísticas de las personas, imprescindible para un buen abordaje de la salud mental, es necesario apostar por la prevención y promoción, la detección, el diagnóstico, el tratamiento y la continuidad de cuidados, sin olvidar el compromiso profesional garantista de la defensa de los derechos humanos y de la lucha contra el estigma; puesto que sin salud mental no es posible lograr el bienestar.
Todo ello hace que el trabajo social juegue un papel fundamental en la lucha por el derecho a crecer en bienestar, y nos sitúa en el compromiso profesional de incorporar la perspectiva de género en la cotidianeidad de nuestro desempeño. No obstante, las mujeres consumen de tres a cinco veces más medicación psicotrópica y ante situaciones que generan malestar, dificultades y conflictos las mujeres lo asumen mediante la culpabilización, se desvalorizan, auto-agreden y pueden generar diversas patologías (depresión, ansiedad, bulimia…).
Además, en el marco de la enfermedad mental grave y duradera el trabajo social forma parte imprescindible de los equipos interdisciplinares, acompañando las necesidades de apoyo durante la rehabilitación y recuperación de las personas que padecen sufrimiento mental.
En resumen, el Trabajo Social en Salud mental:
- Realizar una evaluación y un diagnóstico de la situación psicosocial y social de las personas afectadas.
- Valora los apoyos necesarios para compensar la situación de desventaja o discapacidad detectadas y proporciona los soportes sociales necesarios para potenciar la integración de la persona y su contexto social, favoreciendo la participación en la comunidad.
- Promueve en la comunidad los valores relacionados con la adquisición de hábitos sociales saludables, tolerantes, que reduzcan el impacto y los fenómenos de estigmatización de las personas con problemas de salud mental.
- Acompaña a las personas en el desarrollo de hábitos saludables y en la toma de decisiones personales que conduzcan a compensar las dificultades de interacción con el contexto, como prevención de los efectos adversos de la discapacidad.
- Establece sistemas de protección social para las personas con enfermedad mental dependientes.
Desde el Grupo de Trabajo Social Salud Mental, queremos reivindicar la importancia de la salud mental y social, para que las personas puedan crecer en bienestar, tal y como señala el lema de este año 2022.