Día Europeo de la Mediación: No solo se trata de resolver de conflictos.
Como cada año el 21 de enero se celebra el Día Europeo de la Mediación, una fecha que debemos aprovechar para felicitarnos por la gestión positiva de conflictos y, en nuestro caso, el perfecto binomio entre Mediación y Trabajo Social.
Rebeca Hernández Barrero, trabajadora social, experta en mediación y representante del COTS Madrid en el grupo de expertos y expertas en Mediación del Consejo General del Trabajo Social.
Una trabajadora social nunca deja de serlo. La labor que presta a la sociedad trasciende su título, y en el ejercicio de la mediación, nuestra formación original aporta un valor adicional que se manifiesta de diversas maneras, centrándose en nuestra visión e intervención integral. Esto implica considerar la situación global de las personas en el análisis de casos, abarcando aspectos familiares, económicos, sociales y culturales, así como evaluar sus recursos personales y sociales. Destacamos la capacidad de reconocimiento mutuo y el potencial para comprender y superar las situaciones que enfrentan.
Además, dado que la palabra es una de las herramientas primordiales para las trabajadoras sociales, las técnicas y estrategias inherentes a la mediación constituyen un valioso complemento en nuestra «caja de competencias». La mediación brinda una perspectiva más cualificada y una gestión más efectiva de situaciones conflictivas en nuestro quehacer diario. Entender las posiciones de las personas en el conflicto, manejar las emociones involucradas, orientar hacia posibles soluciones realistas y equitativas… Aunque no seamos mediadoras, tratamos con conflictos cada día así que… ¡animémonos a formarnos en estas técnicas y a mejorar nuestro rol profesional!
Desde una perspectiva holística, la mediación no solo se enfoca en la resolución de conflictos. Un desafío pendiente es poner el foco en la prevención de los mismos. Desde nuestros roles individuales, debemos actuar como «agentes de desescalada» al percibir que una relación o situación está a punto de estallar o al borde del conflicto. Hagamos conscientes a las personas que diseñan los programas y servicios de que éstos deben contemplar acciones que reduzcan la confrontación y que favorezcan la Cultura de la Paz. Pongamos nuestro granito de arena para crear conciencia e imaginemos un mundo en el que, en vez de confrontar, huir o ceder, fuésemos capaces de expresar con sinceridad y respecto qué necesitamos para estar bien.
Aspiremos a ser, en nuestro día a día, meras trabajadoras sociales y avancemos hacia ser ejemplo de una mirada positiva y constructiva respecto de los conflictos que nos rodean, y de los que a veces formamos parte. Seamos en nuestras propias situaciones conflictivas una parte abierta a la empatía, a expresar con respeto nuestras necesidades y a buscar soluciones generosas con nosotras y con los demás.
Feliz día de la Mediación.
