CELEBRADA LA II JORNADA DE TRABAJO SOCIAL EN EMERGENCIAS «EVOLUCIÓN Y FUTURO DEL TRABAJO SOCIAL EN EMERGENCIAS: LIDERAZGO Y COMPETENCIAS PROFESIONALES»

El pasado viernes 29/11/2024, el Colegio Oficial de Trabajo Social de Madrid junto con el Departamento de Samur Social del Área de Gobierno de Políticas Sociales, Familias e Igualdad del Ayuntamiento de Madrid, celebraron la II Jornada de Trabajo social en Emergencias, dedicada al liderazgo y competencias profesionales de las trabajadoras sociales en el contexto de la emergencia.

Durante la inauguración de la jornada, Belén Novillo (Decana del Colegio Oficial de Trabajo Social de Madrid), Mar López (Jefa de Departamento de Samur Social) y Mº Cruz Vergillos Ramos (Directora Tecnica del Consejo General del Trabajo Social), pusieron de manifiesto el papel de las corporaciones colegiales en la apuesta por organizar y formar grupos de intervención con capacidad de actuar en grandes catástrofes.

Mar López dio comienzo a la jornada recordando el papel decisivo de la suma organizada de esfuerzos y la necesidad de  formalizar la colaboración en este ámbito entre Administración y profesionales especializados. En el caso de Madrid, estas jornadas se han celebrado en el marco del Convenio de colaboración mantenido entre el Colegio de Trabajo Social de Madrid y el Área de Políticas Sociales, Familias e Igualdad para la activación del Cuerpo deVoluntariado en Emergencias del Colegio ante grandes emergencias. De forma periódica, el Colegio ofrece una formación exclusiva que permite el acceso al Cuerpo de Trabajadoras Sociales Voluntarias del COTS-Madrid, capacitando a los/as profesionales que deseen estar disponibles para actuar en estas situaciones.

Con un sentido recuerdo hacia la ciudadanía afectada por la DANA, Belén Novillo dedicó la jornada a las compañeras de Sedaví, extensible a todas las profesionales que trabajan en las zonas damnificadas. «Nuestras compañeras estaban afectadas por esta situación, y no dejaron de estar más de diez horas al día dedicadas a sus vecinos y vecinas».

Por su parte, Cruz Verguillos detalló la intervención de los equipos trasladados a las zonas afectadas bajo la coordinación del Consejo General de Trabajo Social, de forma organizada e integradas con el resto de la organización de la emergencia. En señal de agradecimiento a la labor realizada por las compañeras activadas por el Grupo de Intervención en Emergencias Sociales del Consejo General de Trabajo Social, se proyectó un video de Emiliana Vicente, presidenta del Consejo General de Trabajo Social, junto a la entrega de un chaleco que simboliza la actuación de la profesión en grandes emergencias.

La Ponencia Marco, dirigida a revisar la evolución del trabajo social en el contexto de la emergencia, comenzó con una retrospectiva histórica de las grandes emergencias que han marcado la ciudad de Madrid de la mano de Juan Carlos Arellano (Jefe de la Unidd de la Central de Samur Social) – incendios de Alcalá 20 (1983) y Almacenes Arias (1987), atentados del 11 de marzo de 2004, accidente de Spanair de 2008, pandemia por Covid-19, borrasca Filomena-, destacando la adaptabilidad de la profesión a los nuevos retos que el abordaje de las grandes catástrofes conlleva. Prosiguió con la exposición del recorrido normativo que ha llevado al reconocimiento de la emergencia como campo específico de atención social a la ciudadanía, y la evolución de los servicios de atención a la emergencia desde el SITADE al Samur Social, cuyo 20 aniversario se está celebrando durante el año 2024. La presencia de Samur Social en los planes de emergencia y protocolos territoriales y municipales (PEMAM, PEIAM, PAINUNAM, CALORMAD) sitúan al servicio como pilar en la gestión la intervención social y ayuda a la población afectada y la población vulnerable.

Por su parte, ÁngelArricivita (formador y consultor en atención psicosocial en emergencias y miembro asesor del Grupo Estatal de Intervención en Emergencias Sociales (GEIES) del Consejo General del Trabajo Social), centró su intervención en los principales retos a los que nos enfrentamos desde la profesión en relación a las grandes catástrofes desde las diferentes instancias colegiales. Partiendo de la incorporación de la cultura de la emergencia y la ubicación de la emergencia como un campo del Trabajo Social, subrayó la necesidad de perseguir el reconocimiento oficial de la formación posgrado especializada en este ámbito y de promover la investigación y publicación en la materia. Otros de los retos que puso de manifiesto fueron el conseguir la involucración del resto de agentes intervinientes en el abordaje de emergencias, desde la prevención primaria en los dispositivos de atención social a la instauración de servicios permanentes de atención social 24 h/365 días, así como la creación de sinergias con otros especialistas de la emergencia y empresas logísticas, teconológicas y de telecomunicaciones

En la Mesa destinada a repasar las competencias profesionales en el Trabajo Social para grandes emergencias, José María Morán (Coordinador de Emergencias en el Consejo Andaluz y del GEIS en el Colegio Oficial de Trabajo Social de Sevilla) partió de la transversalidad de la intervención psicosocial en la experiencia de la emergencia, que requiere el desarrollo de competencias especializadas, entre las que destacó: la incorporación del daño social ocasionado en las condiciones personales, familiares, sociales y laborales de la persona afectada; el conocimiento de los mecanismos bioquímicos que se activan y su impacto en el comportamiento; la autenticidad del/la profesional y el manejo de su propia vulnerabilidad. Así mismo, puso de relieve técnicas concretas asociadas a estas competencias y habilidades blandas y duras desarrolladas por los/as trabajadores/as sociales que favorecen la relación de ayuda y el vínculo con las personas, tales como la capacidad de trabajo con personas de diferentes culturas, la integridad o la competencia emocional. “La comprensión produce alivio”, concluyó.    

Mar Ureña (ex Decana del Colegio de Trabajo Social de Madrid y miembro del Cuerpo de Trabajadoras Sociales Voluntarias del Colegio) continuó explicando competencias profesionales transversales indispensables en el trabajo en grandes emergencias (toma de decisiones, trabajo en equipo interdisciplinar, habilidades relacionales, adaptación a nuevas situaciones…), así como específicas del marco profesional del Trabajo Social (ayuda en la toma de decisiones, valoración de necesidades y urgencia de las situaciones, gestión de conflictos y problemas éticos complejos, etc) Si bien hay que “reconocer y celebrar lo construido” – en palabras de Mar Ureña, recordando los 19 años de funcionamiento del Cuerpo de Voluntariado en Emergencias del COTS Madrid del que fue parte activa- , es indispensable continuar avanzando en la construcción y sistematización de un marco teórico específico de la emergencia. «Cada emergencia nos hace enfrentarnos a situaciones nuevas como profesionales«

Finalizó la mesa con las aportaciones de Manuel Gutiérrez (docente en la UNED y consultor), quien hizo un recorrido por la construcción del Trabajo Social en Emergencias durante los últimos 40 años, remarcando la praxis y el conocimiento generado en estos años. Incidió en que las competencias necesarias para dar respuesta a la emergencia parten de la concepción de las necesidades  biopsicosociales a atender, seleccionando de entre las competencias recogidas en el Libro Blanco de Trabajo Social aquellas relacionadas con este ámbito (intervención en crisis, capacidad de trabajar en redes y mediación entre los ciudadanos y otros sistemas y capacidad de evaluar, investigar y formar), situándoles en los tres estados de la emergencia: preemergencia, emergencia y postemergencia. Terminó con una acertada reflexión “Sabemos, Podemos, Queremos “

Por último, en la tercera Mesa se profundizó en el rol de liderazgo de las trabajadoras sociales en las situaciones de emergencia. Desde diferentes ámbitos, el Trabajo Social está presente en la articulación de dispositivos y servicios para atender a las personas damnificadas – sea por desplazamientos forzosos fruto de conflictos bélicos o de orden geopolítico, sea por desastres naturales- tanto desde la atención directa a la población, como desde la organización de estructuras de acogida o la identificación y valoración de necesidades. Pudimos escuchar el testimonio de profesionales que desempeñan su labor dentro del marco de la emergencia desde distintos planos administrativos y organizacionales.

Lidia Ramos (Jefa de la división jurídica y social de la AMAPAD), explicó la atención a la llegada e integración de personas con discapacidad ucranianas, exponiendo diferentes factores que han debido ser abordados en el proceso de acogida e intervención (regularización administrativa, acceso a la protección de la salud, barrera idiomática…)

Elvira Cortón ( Jefa del Servicio de Emergencia Social de la Comunidad de Madrid) expuso el funcionamiento  del Servicio de Emergencia Social de la Comunidad de Madrid, que ofrece cobertura inmediata en situaciones de urgencia y emergencia social fuera del ámbito del Ayuntamiento de Madrid;

Arturo Sánchez ( responsable adjunto de Accem en la Comunidad de Madrid), detalló la trayectoria de la entidad en la atención a personas migrantes y el plan de intervención en emergencias elaborado por la organización que contiene acciones y procesos unificados en base a la experiencia adquirida.

Para concluir, pudimos escuchar el emotivo relato de nuestra compañera Marta Cubero (Jefa del Servicio de Apoyo Social de la AMAPAD, vocal de la Junta de Gobierno de COTS Madrid y miembros del GEIES del Consejo de Trabajo Social), durante la intervención del equipo de Madrid y de tantos otros equipos desplazados desde diferentes puntos de la geografía. Comenzando con un agradecimiento al Presidente y compañeras del COTS de Valencia y a las compañeras del GEIES y COTS de Aragón, compartió momentos de la intervención del equipo desplazado desde Madrid con el equipo local de Servicios Sociales de Sedaví. Resaltó la necesidad de ofrecer escucha y contención emocional a las compañeras, intervinientes en la resolución de la emergencia a la vez que víctimas de la catástrofe, porque “Cuidar al que cuida no es solo una cuestión de humanidad, sino una obligación​ ética y profesional”. Continúo explicando el resto de actuaciones desarrolladas por los/las trabajadores/as sociales desplazados/as a la zona, complementando a los/as profesionales locales en la detección y valoración de necesidades y coordinación, resaltando la función crucial que el trabajo social comunitario está desempeñando en la resolución de la crisis. “En esta emergencia ha quedado patente que el Trabajo Social es un servicio esencial y fundamental durante todo el proceso de la emergencia”, señaló.

Reflexionando en torno a los liderazgos en Trabajo Social, puntualizó, en alusión al modelo de liderazgo propuesto por Ainhoa Berasaluze, que todas y todos podemos y debemos ser líderes y lideresas en Trabajo Social “ viviendo, aprendiendo y creciendo desde dentro hacia fuera con otras personas” y “para el propósito común, desde el cuidado y acompañamiento de los equipos profesionales”

En esta Jornada, se reivindicó el importe papel de la profesión del Trabajo Social en el abordaje de las situaciones de grandes emergencias, pero también en las situaciones de urgencia social; poniendo el foco en la necesidad de mejorar la prevención y el despliegue de medios suficientes para evitar las situaciones de crisis. Además de para visibilizar la importante labor de las trabajadoras sociales en este ámbito de actuación, esta Jornada ha servido para poner en común la práctica, generando un espacio de sistematización de experiencias y aprendizaje compartido.