Tiempos inciertos para los/as estudiantes: La Preocupación del Colegio Oficial de Trabajo Social de Madrid por las Prácticas Curriculares en el Grado de Trabajo Social
El COTS-Madrid emite un Comunicado sobre la preocupación del Colegio Oficial de Trabajo Social de Madrid por la situación actual del desarrollo de las prácticas curriculares del Grado en Trabajo Social.
El Colegio Oficial de Trabajo Social de Madrid, muestra especial preocupación por la situación actual que están viviendo tanto estudiantes de Grado de Trabajo Social, como las universidades que imparten dicho grado y las propias entidades (públicas y privadas) que cada curso ofertan plazas y colaboran en conseguir que nuestros futuras/os compañeras/os puedan realizar sus prácticas curriculares (contempladas en sus planes de estudios) y poder finalizar su formación reglada del Grado de Trabajo Social. Esta colaboración (nexo entre lo académico y lo profesional) es un compromiso profesional y ético para todas y todos, con el fin de promover y asegurar prácticas formativas y de calidad.
El Real Decreto Ley de la Reforma de Pensiones Real Decreto-ley 2/2023, de 16 de marzo, de medidas urgentes para la ampliación de derechos de los pensionistas, la reducción de la brecha de género y el establecimiento de un nuevo marco de sostenibilidad del sistema público de pensiones, contiene la siguiente medida: la inclusión en la Seguridad Social de los estudiantes de grado (y de otras disciplinas y estudios) en prácticas que se iba a hacer efectiva coincidiendo con el inicio de curso, pero finalmente se hará efectiva a partir del 1 de enero de 2024 y tiene la finalidad de desarrollar, precisar y aclarar algunos de los aspectos previstos.
Hasta el momento, únicamente los y las estudiantes con prácticas remuneradas cotizaban a la Seguridad Social en concepto de contingencias comunes y contingencias profesionales. Con este cambio, y a partir de enero afecta también a las realizadas por alumnado universitario de grados, máster, doctorado, títulos propios de la universidad, diplomas de especialización o de experto. Las prácticas curriculares, forman parte de los planes de estudios universitarios como una asignatura más, y tememos la posible disminución de la oferta de prácticas externas a partir de este curso.
La obligatoriedad de cotización a la Seguridad Social de las prácticas conlleva un grave problema económico, difícilmente asumible para las universidades, además de la gestión administrativa que supone la actualización de convenios de colaboración con las entidades que ofertan prácticas. Las universidades se ven desbordadas por la gestión de adaptación a la nueva normativa, la consecución de plazas de prácticas de Trabajo Social para cubrir la demanda necesaria, así como incorporación de los/as estudiantes y velar por el cumplimiento de horas que deben realizar en el periodo establecido en los planes de estudios.
La formación en prácticum es imprescindible para que los y las estudiantes de Trabajo Social salgan al mercado laboral de la mano con profesionales en activo y con una experiencia en los diferentes ámbitos, con conocimientos, competencias y habilidades de lo que implica la acción profesional, y tengan la mejor formación competencial que podamos darles. Es nuestra profesión una de las que crece en la práctica, en la que la maestría y la expertise tiene mucho de conocimiento implícito que solo se puede adquirir de una manera, en la acción.
Debido a la reforma anteriormente citada, las universidades de todo el territorio nacional, y en el caso que nos ocupa, las que se imparte el grado de Trabajo Social, llevan meses trabajando en resolver las dudas y dificultades que se derivan de la aprobación de esta medida en cuanto a quien asume los costes por estudiante de cotización a la seguridad social, las gestiones con las entidades sociales para conveniar e incluir dichas cláusulas, etc. Comienza el proceso de incorporación de las/os estudiantes y futuros trabajadoras/es sociales a los centros donde va a desarrollar sus prácticas curriculares profesionales, y está siendo un proceso en el que la mayor incertidumbre es que las/os estudiantes no saben si van a poder realizarlas y completar su formación para la obtención del grado. Un problema que afecta a las/os alumnas/os, a las/os responsables de coordinar dicha tarea y a las propias universidades y para las/os profesionales supervisores en los centros de prácticas.
Desde el Colegio Oficial de Trabajo Social de Madrid, queremos mostrar nuestro apoyo tanto a las universidades, a los/as estudiantes afectados, como a las/os profesionales de entidades colaboradoras.